Un Reino Unido en el limbo, el legado de Theresa May
La saliente primera ministra Theresa May será recordada en la historia del Reino Unido por dejar en un limbo político y económico a su país como consecuencia de su fracaso al sacar adelante el ‘brexit’, como se le llama al divorcio británico de la Unión Europea (UE).
En la hoja de vida de la premier quedará haber sido la gobernante que dejó al país en la peor crisis que se sufre desde la Segunda Guerra Mundial.
May anunció a finales de mayo su renuncia, tras verse acorralada en el Parlamento, que bloqueó el acuerdo suscrito en noviembre con la UE, en el que se fijaron los términos del ‘brexit’. Y, aunque oficialmente dimitió el viernes, May seguirá como premier hasta que el partido Conservador elija un sustituto.
Hasta ahora se había hablado de la posibilidad de que el nuevo inquilino del 10 Downing Street (sede de gobierno) fuese electo, tras varias rondas eliminatorias entre 11 aspirantes al cargo.
Pero es posible que la espera por un nuevo líder ‘tory’ sea más corta, pues el Comité de 1922 (grupo de ilustres parlamentarios conservadores) y la junta del partido oficialista pusieron nuevas reglas para la contienda.
Los candidatos deben obtener el apoyo de al menos ocho miembros del Parlamento, en lugar de los dos que se requirieron en 2016, cuando May se aseguró el puesto, y lograr al menos 16 votos en la primera votación y 32 en la segunda, lo que aceleraría el proceso.
La primera votación para el nuevo líder conservador será entre parlamentarios conservadores el jueves, pero se prevé que haya un elegido a finales de julio, lo que haría que May permanezca en el poder otras seis semanas.
(…) Cualquiera que llegue al poder heredará los problemas que llevaron a May a renunciar
Entre los favoritos están el exministro de Exteriores Boris Johnson, el ministro de Ambiente, Michael Gove; la exlíder de los conservadores en la Cámara de los Comunes Andrea Leadsom y el ministro de Exteriores, Jeremy Hunt.
“Estamos frente al peor de los escenarios políticos, donde cualquiera que llegue al poder heredará los problemas que llevaron a May a renunciar”, dijo a EL TIEMPO el analista político Stephen Bellas.
A la luz del referendo del 2016, en el cual se aprobó el brexit y que llevó a la renuncia de David Cameron, May se convirtió en la segunda mujer en detentar el cargo de primera ministra, desde la llamada ‘dama de hierro’, Margaret Thatcher (1979-1990).
Durante tres años, la premier se empeñó en cumplir con la promesa de sacar adelante el ‘brexit’.
“May se quedó con la papa caliente del brexit que nadie quería. Ni siquiera ella misma lo quería”, recordó Norman Smith, comentarista de la BBC. De hecho, la primera ministra fue declarada líder de su partido Conservador y, con ello, premier, luego de que los otros candidatos se retiraron de la contienda.
Ella entró en negociaciones en Bruselas mal preparada y recibió lecciones en realidades brutales de economía y diplomacia
Los más allegados a May aseguran que ella es fuerte, determinada y apasionada, características que no siempre le jugaron a favor.
El diario ‘The Guardian’ le dedicó un duro editorial en el cual asegura que la primera ministra estuvo “mal asesorada por ideólogos que pensaban que un brexit difícil se podría lograr a un costo mínimo”. Y prosigue: “Pero eso no es una excusa… Ella entró en negociaciones en Bruselas mal preparada y recibió lecciones en realidades brutales de economía y diplomacia. Eso fue lo suficientemente humillante, pero su incapacidad para transmitir esas lecciones a una audiencia nacional fue imperdonable”.
Maxine Molyneux, profesora de University College London, afirmó a EL TIEMPO que a May “le dieron el cáliz envenenado para tratar el ‘brexit’ y siguió una estrategia fallida, que ha dejado el país dañado y humillado. En su intento por mantener unido su fragmentado partido, al ignorar los deseos del 48 por ciento que no quería ‘brexit’, y al tratar de apaciguar a los ultrabrexitarios, May ha polarizado el país y ha deslegitimado las políticas parlamentarias británicas”.
Las políticas de austeridad de su partido, según un reciente informe de la ONU, llevaron a 14 millones de personas a la pobreza, de las cuales 1,5 millones están en la miseria. La delincuencia juvenil violenta se encuentra en niveles récord. Y el ‘brexit’ ha dañado irreparablemente la economía con empresas que se van en masa y trabajadores que regresan a Europa.
Le dieron el cáliz envenenado para tratar el ‘brexit’ y siguió una estrategia fallida, que ha dejado el país dañado y humillado
Para el periodista y analista político Ulises Maldonado, la gobernante “se caracterizó en estos tres años por haber perdido el pulso con su propio partido y con Europa”.
El experto puso como ejemplo el errático llamado a las elecciones del 2017, donde May trató de ganar legitimidad para negociar el ‘brexit’, convencida de que podría aumentar su mayoría parlamentaria de 13 a algo más que 100. “Pero se estrelló y casi pierde hasta la silla (…) Los conservadores entraron en crisis y se fragmentaron tras perder la mayoría que necesitaban para lograr la aprobación del ‘brexit’”, dijo.
Eso marcó el tono de las tres derrotas parlamentarias de May, que la llevaron a posponer para el 31 de octubre la fecha de salida de la UE, prevista para el 31 de marzo. Además, se vio obligada a aceptar ir a las elecciones parlamentarias europeas del 23 de mayo, cuando su partido fue casi barrido, dejando una espesa polvareda a su sucesor.
MARÍA VICTORIA CRISTANCHO
Para EL TIEMPO
LONDRES