‘Invertir en los migrantes permite que la economía crezca’: expertos
Con un llamado a la consolidación de políticas públicas de largo plazo que permitan pasar de una etapa de atención a una fase de integración total de la población venezolana migrante en Colombia se realizó el foro ‘Cómo atender el éxodo que nos cambió para siempre’, primero que se realiza gracias a la alianza del proyecto Panas en Colombia de EL TIEMPO y Acdi-Voca.
La gobernadora del Valle del Cauca, Dilian Francisca Toro, quien estuvo en el panel de apertura, señaló que el Gobierno Nacional y los departamentales deben apuntar a “crear una política a 10 o 15 años” que “permita que los venezolanos que lleguen a Colombia dejen de ser vistos como migrantes y se inserten en la sociedad como ciudadanos, con los mismos derechos de quienes estamos en el país”.
Toro afirmó que, de no hacerse, la situación podría ser más complicada. Y puso como ejemplo de eso al Valle del Cauca, donde se han presentado casos críticos de falta de acceso a educación y de salud, que han llevado, incluso, a la muerte de un niño por desnutrición.
“Tenemos que hacer una política a largo plazo. Trabajar en la regularización, el ingreso a la sociedad y la empleabilidad. Se necesita que logren entrar al mercado laboral, al sector salud, acceso a educación y evitar la violación de Derechos Humanos en cuanto a explotación laboral. No se les puede pagar cualquier cosa”, enfatizó la Gobernadora del Valle.
Según cifras reveladas por Migración Colombia durante el evento, actualmente hay 58.516 migrantes venezolanos en el departamento del Valle. De ello, 44.940 (el 77%) están en Cali y 24.467 ya cuentan con el Permiso Especial de permanencia (PEP).
Rafael Eugenio, subdirector nacional de verificación de Migración Colombia, afirmó que la meta del Gobierno es unificar los documentos para facilitar la regularización de los migrantes venezolanos.
La Alcaldía de Cali ha llevado a cabo estrategias de atención primaria como incluir a los venezolanos en los comedores comunitarios, acceso a salud de madres gestantes y también se anunció la inauguración de un centro de atención al migrante en la capital vallecaucana.
“Hoy en día hay más de 5.000 niños y niñas en nuestras entidades. Estamos acompañando a los menores y a las madres gestantes”, afirmó Carolina Campo, secretaria de Bienestar Social de la Alcaldía de Cali.
Se necesita que logren entrar al mercado laboral, al sector salud, acceso a educación y evitar la violación de Derechos Humanos en cuanto a explotación laboral
En Europa, inversión en migrantes significó crecimiento
Una de las ponencias que más llamó la atención fue la realizada por el invitado internacional, Peo Hansen, profesor del Instituto de Investigación en Migración Etnicidad y Sociedad de la Universidad de Linköping, quien relató cómo en países como Suecia y Alemania los indicadores de crecimiento económico aumentaron cuando los gobiernos se decidieron a invertir recursos en la atención a la población migrante.
Hansen aseguró que, contrario a lo que pregonan los dirigentes políticos actuales sobre el peligro para las finanzas públicas que podría significar destinar muchos recursos a la atención de la población refugiada o migrante.
“Los políticos tienen esa percepción de que los migrantes son dinero botado a la caneca. Pero la realidad es que en Alemania y Suecia, la gran escala de gasto en los refugiados permitió el crecimiento económico y del PIB más importante en los últimos años. Y Suecia admitió que en 2015 entraron 165 mil refugiados, y la economía creció 4 %”, dijo el experto.
Y añadió: “El gasto en refugiados, en muchos lugares, ha sido una manera nueva de redescubrir la viabilidad de muchos sectores. Lo importante es a dónde va el dinero. No se quedaron en los bolsillos de los refugiados. El sector privado, los negocios, los gobiernos regionales y las familias recibieron fondos estatales por atender a esta población”.
También expresó cómo, no solo en Alemania y Suecia, sino en países tradicionalmente opuestos a mayor apertura migratoria, la migración significó importantes avances en el acceso a mano de obra calificada.
“La población en estos países está envejeciendo. Y se necesita mano de obra y con estas migraciones, parece que han llegado en el momento exacto”, señaló Hansen y remató su presentación con esta frase: “Cuatro años después de 2015, nadie ha podido demostrar que la migración ha sido perjudicial para Europa”.
Cuatro años después de 2015, nadie ha podido demostrar que la migración ha sido perjudicial para Europa
Obstáculos y oportunidades
En ese mismo sentido se pronunció Pablo Uribe, subsecretario de Política de Seguridad de la Alcaldía de Cali, quien afirmó que “no hay ninguna relación entre la llegada de venezolanos con el supuesto aumento de la inseguridad”.
“Los colombianos tenemos que cambiar la mentalidad porque hay miles de venezolanos que están seguros de que se van a quedar acá. No es de pesar, es de humanidad”, expresó Uribe.
En ese mismo panel, el padre José González, embajador de la reconciliación de Acdi-Voca – Par, propuso cinco verbos para empezar la inclusión con la población venezolana: “Acoger, acompañar, promover, incluir y compartir”.
Sin embargo, aún son escasas las oportunidades para mejor acceso a derechos. Un ejemplo de ello es que, actualmente, en la Bolsa de Empleo del Sena hay registradas apenas 3.200 hojas de vida de población originaria de Venezuela, apenas el 7 % del total.
En cuanto a la educación, el subsecretario de Calidad Educativa de la Alcaldía de Cali, César Ocoró, afirmó que se ha trabajo en la inserción escolar de niños y adolescentes, pero reconoció que el panorama en población adulta es más complicado, porque se requiere de documentación y convalidación para acceder a educación superior.
Un aspecto que quedó sin respuesta fue el de la creación de una política educativa que contemple la integración entre los estudiantes colombianos que compartirán aula con los venezolanos.
EL TIEMPO