Maduro dice que primer día de diálogo en Barbados fue ‘auspicioso’

El jefe del régimen de Venezuela, Nicolás Maduro, calificó este lunes en la noche como “bastante auspiciosos” los resultados de la primera jornada de acercamiento con la oposición venezolana que se realizó en la isla de Barbados, a instancias del Gobierno noruego.

Tras un encuentro con el líder espiritual indio Sri Sri Ravi Shankar, Maduro dijo en rueda de prensa que el jefe de la delegación, Jorge Rodríguez, le ofreció reportes “bastante auspiciosos” al término de la primera jornada en Barbados, que habría ocupado cinco horas. “Ha arrancado el proceso de diálogo con la oposición venezolana”, señaló el mandatario, quien explicó que en las conversaciones se aborda “integralmente una agenda” de seis puntos, que incluye temas políticos, sociales y económicos, entre otros, pues “no se está hablando un solo tema”.

Llamó a los opositores a que “no se dejen engañar” sobre la agenda del diálogo, aunque alegó que en “los temas de la oposición no me meto”, por cuanto este sector tiene “grandes contradicciones”.

“Estoy seguro de que van a ir saliendo acuerdos parciales para beneficio de Venezuela”, acotó, siempre y cuando se trabaje “con buena voluntad” y si “no hay intervencionismo gringo para dañar esa mesa”. “Hemos sido tercos en la búsqueda del diálogo con la oposición”, sostuvo Maduro, quien enumeró las fallidas conversaciones ocurridas desde el año 2014 hasta el presente.

“Ha llegado la hora de ponernos de acuerdo”, dijo y, como manifestó el pasado 5 de julio durante los actos por la celebración de la independencia de Venezuela, reiteró que “en el diálogo todas las partes tienen que sentarse y estar dispuestos a ceder posiciones”.

El diálogo se da pocos días después de la publicación de un informe de la alta comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, en el cual se confirmaron las denuncias de que el régimen venezolano ha consentido y promovido ejecuciones extrajudiciales.

Momento clave para Guaidó

Pero el nuevo diálogo, con la mediación de Noruega, representa para Guaidó un difícil ejercicio frente a quienes en el ala radical de la oposición consideran que ya no se debe prestar para que Maduro gane tiempo, como lo hizo con otros acercamientos, como el de República Dominicana, cuando las protestas sí tenían al régimen en una situación más difícil que la actual, y tomando en cuenta la repercusión del informe de la ONU.

Maduro dijo que exigió “una rectificación de las mentiras” que, considera, están incluidas en el informe de la ONU y afirmó que la alta comisionada Michelle Bachelet “dio un paso en falso” con ese reporte.

Guaidó pidió a sus seguidores no ceder a “intrigas” y dijo que la principal motivación del acercamiento es “ponerle fin al sufrimiento de los venezolanos”.

Pero, por otra parte, el presidente encargado debe enfrentarse con la realidad de que a pesar de la presión internacional, de la ayuda de EE. UU., de las marchas de apoyo ciudadano en las calles, Maduro sigue en el poder con el apoyo de las fuerzas armadas y del ministro de Defensa, Vladimir Padrino López, que volvió a ser confirmado en el cargo pese a las versiones de que habría sido parte de una intentona golpista.

“En atención a la mediación del Gobierno del Reino de Noruega para poner fin a la tragedia que padecemos los venezolanos, se asistirá a una reunión con representantes del régimen usurpador en Barbados, para establecer una negociación de salida a la dictadura”, señaló el equipo de Guaidó.

Para el politólogo Jesús Castillo-Molleda, “es evidente que la oposición no logra vencer al Gobierno, ni sola ni con la ayuda del Gobierno de EE. UU. Eso la obliga a buscar otros mecanismos para llegar a unos acuerdos a favor de unas elecciones”.

El Gobierno “sigue buscando ganar tiempo, pues ha mostrado que carece de voluntad para resolver los problemas”, añadió.

Guaidó anunció que la Asamblea Nacional (Legislativo) aprobará el reingreso de Venezuela al Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca (Tiar), un acuerdo regional de defensa militar mutua que brinda un marco legal a una posible intervención extranjera. Venezuela abandonó ese mecanismo hace más de seis años.

Se asistirá a una reunión con representantes del régimen usurpador en Barbados, para establecer una negociación de salida a la dictadura.

Es decir, Guaidó se presta a un diálogo, pero al mismo tiempo abre las puertas a un mecanismo drástico para forzar la salida de Maduro, una jugada a dos bandas que no se entiende bien entre la población.

Guaidó recibió este lunes al representante de la Unión Europea para Venezuela, Enrique Iglesias, nombrado en mayo “asesor especial”. “Tanto en Oslo como en el Grupo Internacional de Contacto y todos los espacios de presión, nuestro objetivo es el mismo: lograr una solución definitiva de la crisis en nuestro país”, dijo Guaidó.

Más tarde, Iglesias fue recibido por la vicepresidenta venezolana, Delcy Rodríguez. La televisión gubernamental mostró imágenes del encuentro. “Enrique Iglesias ratifica su compromiso con el proceso de diálogo”, informó en Twitter la vicepresidencia.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *