Por qué Asia es el continente con menor tasa de homicidios en el mundo

La oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito lanzó un informe esta semana que reúne las últimas cifras mundiales sobre los homicidios. El documento, titulado Estudio Mundial contra la Droga y el Delito, dice que un total de 464.000 personas fueron víctimas de homicidios en 2017, una cifra que superó a todos los muertos por guerras durante ese año.

Un dato particular que arroja el estudio señala que Asia tiene los índices de homicidios más bajos del mundo, con apenas 2,3 casos por cada 100.000 habitantes. Y desagregando los datos por subregiones, el Este de Asia tiene 1 caso por cada 100.00 y Singapur, 0,2.

Filipinas, en cambio, tiene 8,4 homicidios registros de estos hechos, una cifra que, aunque es mayor en comparación con otros países asiáticos, contrasta con América Latina que tiene 25 casos por cada 100.000 habitantes. África, en cambio, tiene 13 casos por cada 100.000; Europa, 3; Oceanía, 2,8 y América, 17, 2.

¿A qué se debe ese fenómeno en las bajas cifras del continente asiático?(Le puede interesar: ¿Cómo ingresa un sitio a la Lista del Patrimonio Mundial?)

El contexto social y político

El estudio detalla que las tasas bajas de Asia se explica porque en países muy poblados (como China, Japón y Corea), presentan índices por debajo de un muerto por cada 100.000 habitantes.

Las cifras tienen correlación con una modernización con un énfasis en logros educativos y una cultura que premia la planificación a largo plazo, según dice esa oficina de la ONU. Incluso, el informe destaca a Singapur como un ejemplo de éxito en la lucha contra la violencia homicida y establece un paralelo con Jamaica, un país con 57 homicidios por cada 100.000 habitantes.

El documento dice que tras su independencia del Imperio Británico a principios de la década de 1960, los dos países tenían índices socioeconómicos, sistemas políticos y tasas de criminalidad similares. La diferencia actualmente es que en el país asiático se creó un modelo de control de la corrupción, inversión de sanidad, educación y vivienda pública.

Asia tiene los índices de homicidios más bajos del mundo, con apenas 2,3 casos por cada 100.000 habitantes.

China

La cultura y la fiolosfía asiática hace un énfasis en el orden y la armonía en la sociedad.

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David Castrillón, quien pertenece al Observatorio de Análisis de los Sistemas Internacionales línea Asia, dice que en países como China, Japón y Corea tienen culturas que hacen hincapié en la importancia del orden entre todos los miembros de la sociedad. “Los ciudadanos deben seguir al Gobierno como un hijo seguiría a un padre”, menciona.

“Estas sociedades tienen un concepto armonioso, en las que disputas no se resuelven mediante las agresiones ”, agrega Castrillón.

Lina Álvarez, coordinadora del Observatorio Asia-Pacífico de la Universidad Tadeo, menciona que la presencia de instituciones fuertes dentro de estos países tiene una repercusión enorme en las tasas de homicidio. “Las personas tienen la percepción de que en caso de cometer un crimen van ser castigados, lo que disminuye la propensión a actuar violentamente”.

Lo cierto es que muchos de estos países del este asiático tienen modelos de gobierno autoritarios donde el uso de las armas y el tráfico de armas está fuertemente regulado. “El que posee las armas es visto como alguien despectivo y se ve como una agresor”, añade David Castrillón.

Pero para Federico Rocha, profesor de cátedra de la Universidad Javeriana experto en relaciones internacionales con enfoque en Asia-Pacífico, algunos países de este continente tienen un sistema político disfrazado de democracia que en realidad son profundamente autoritarios.

“La violencia en este continente siempre ha estado presentes. Recordemos los casos como el genocidio de Camboya o las agresiones contra los Rohingyas en Birmania. Y aunque se pueda tener la percepción de ser una región segura, no le da campo de acción al pueblo y hay autocracias disfrazadas de democracia”, menciona Rocha.

Por otro lado, algunos países Oriente Próximo están sumidos en crisis humanitarias, como es el caso de Siria, o en la violencia que protagonizan diferentes grupos terroristas y fundamentalistas. Sin embargo, el informe aclara que para efectos de este estudio no se tiene en cuenta este tipo de conflictos.

El informe, en perspectiva

La ONU compara la cifra de 2017 con la de 1992 y concluye que, aunque el número de fallecidos ha subido un 17 %, se ha producido un descenso de la tasa de homicidios, es decir, del número de víctimas por cada 100.000 habitantes, debido al aumento de la población. Así, de los 7,2 homicidios por cada 100.000 habitantes de 1992, se pasó en 2017 a 6,1, disminuyendo, en términos generales, el riesgo de morir por esa causa.

«En términos de una tendencia a muy largo plazo, estamos en las décadas más pacíficas» explica a Efe Angela Me, una de las coordinadoras del informe. Sin embargo, dentro de esa tendencia general, desde 2015 se ha detectado una leve subida, por primera vez en décadas de bajada. Ese aumento puede explicarse por el aumento en América Latina, la región con la tasa más alta y la única donde sube y, especialmente, en países como Brasil y México, cuyo peso demográfico influye en la tasa de todo el continente.

Angela Me explica que si, en general, «las diferencias en tasas de homicidios entre países pueden ser explicadas principalmente con el desarrollo socioeconómico», aunque en América Latina no siempre se cumple esa correlación.

«La interpretación es que hay un componente que otras regiones no tienen, que es el crimen organizado y las bandas«, señala Me, quien añade a esa ecuación el extendido uso de armas de fuego, mucho más habitual que en otras partes del mundo.

REDACCIÓN APP
*Con información de EFE

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