¿Qué pasará si Pedro Sánchez renuncia a la presidencia del gobierno de España? Estos son los caminos que se abren
El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, abrió este miércoles una nueva tormenta política en ese país al anunciar que está estudiando si abandona o no el cargo tras una denuncia contra su esposa, Begoña Gómez, por presunto tráfico de influencias y corrupción.
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El líder del Ejecutivo aseguró que la investigación contra Gómez obedece más bien a un ataque personal orquestado por la derecha, y aseguró que anunciará si seguirá o no al frente del Ejecutivo el próximo lunes 29 de abril.
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¿Qué llevó a Sánchez a plantear la posibilidad de renunciar y qué escenarios se abren si finalmente abandona el cargo? Estas son las claves de la noticia.
¿Por qué investigan a Begoña Gómez, esposa de Sánchez?
El proceso, afirmó el TSJM, comenzó el 16 de abril tras recibir una denuncia por parte del sindicato Manos Limpias, cercano a la derecha, que señala que, valiéndose de su condición, Gómez habría recomendado o avalado con su firma a empresarios que se presentaron a licitaciones públicas.
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La investigación está relacionada, según el medio citado, con los presuntos vínculos de Gómez con el grupo turístico español Globalia, propietario de la aerolínea Air Europa, en un momento en que la compañía mantenía conversaciones con el gobierno para conseguir un rescate de gran envergadura tras verse afectada por la caída del tráfico aéreo debida a la pandemia del coronavirus.
En aquel momento, Gómez dirigía el IE Africa Center, una fundación relacionada con la escuela de negocios Instituto de Empresa (IE), argo que abandonó en 2022. El Confidencial afirma que el «IE Africa Center de Gómez firmó en 2020 un acuerdo de patrocinio con Globalia» y que la esposa del presidente del Gobierno «se reunió en privado con el consejero delegado del ‘holding’ turístico, Javier Hidalgo, en las propias oficinas de la compañía».
«En esas mismas fechas, Globalia estaba negociando con el Gobierno un rescate millonario», añadió el medio.
Luego, en noviembre de 2020, el gobierno de Sánchez ofreció una línea de ayuda de 475 millones de euros (507 millones de dólares) a Air Europa surgida de un fondo de 10.000 millones de euros destinados a apoyar a empresas estratégicas en dificultad por la pandemia. La compañía española fue la primera en beneficiarse de este fondo.
¿Qué respondió Sánchez tras la denuncia contra su esposa?
En el texto, que lleva por título ‘Carta a la ciudadanía’, el jefe del Ejecutivo español asegura que las denuncias contienen informaciones espurias y que se trata de «una operación de acoso y derribo por tierra, mar y aire» que quiere hacerle desfallecer «en lo político y en lo personal».
Soy consciente de que denuncian a Begoña no porque haya hecho algo ilegal, ellos saben que no hay caso, sino por ser mi esposa
Y agregó: «Fueron conscientes de que con el ataque político no sería suficiente y ahora han traspasado la línea del respeto a la vida familiar de un presidente del Gobierno y el ataque a su vida personal».
«Me urge responderme a la pregunta de si merece la pena, pese al fango en el que la derecha y la ultraderecha pretenden convertir la política. Si debo continuar al frente del Gobierno o renunciar a este alto honor», añadió.
¿Qué reacción causó el anuncio sobre la posible dimisión?
Varias voces del Gobierno salieron en defensa de la esposa del jefe del Ejecutivo, calificando de «falsa» la denuncia presentada por Manos Limpias y advirtieron que no permitirían lo que denominaron como «prácticas trumpistas» (en referencia al expresidente de Estados Unidos Donald Trump) que socavan la democracia española.
Y mientras los ministros y los dirigentes socialistas cerraban filas en torno a Sánchez, la oposición conservadora coincidía en acusar a Sánchez de hacerse la víctima, al tiempo que le pedía al mandatario que dé explicaciones sobre el papel que habría jugado su esposa en favorecer a algunos personajes en las licitaciones del gobierno.
El jefe del Ejecutivo debe comparecer de forma urgente para dar una explicación razonada de los escándalos que rodean a su partido, a su gobierno y a su pareja
El PP dijo en X que el mandatario apuesta «por la victimización y la lástima en lugar de por la rendición de cuentas y la claridad».
A su vez, fuentes de Vox indicaron que Sánchez trata de «victimizarse para tapar el cenagal de corrupción que inunda su mandato», y le invitaron a reflexionar, si le apetece, «pero tras dimitir».
Tras publicar la carta, Sánchez se reunió en la sede de la Presidencia del Gobierno con varios miembros del Ejecutivo y dirigentes socialistas para abordar los pasos a seguir.
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¿Pero, qué probabilidades hay de que Sánchez dimita?
Roberto García Alonso, profesor asociado de la Universidad de La Sabana e Investigador Distinguido de la Universidad de Salamanca, en España, le dijo a EL TIEMPO que la posibilidad de que Pedro Sánchez renuncie a la presidencia del gobierno español depende de múltiples factores.
«Históricamente, la dimisión de un líder político bajo circunstancias similares no es común, pero no es imposible dependiendo de los posibles desarrollos legales del caso en cuestión y en qué medida afecte su favorabilidad en la opinión publica», explica.
El experto también asegura que Sánchez ha presumido en el pasado de tener tolerancia cero con los casos de corrupción, una premisa que tendría un impacto directo en su decisión de renunciar. El analista, de hecho, recuerda casos recientes como la renuncia del primer ministro Antonio Costa en Portugal, que se apartó del cargo tras verse envuelto en una investigación relacionada con tráfico de influencias y corrupción.
Por su parte, Cristian Rojas, profesor de la Facultad de Derecho y Ciencias Políticas de la Universidad de La Sabana, considera probable que Sánchez dimita el lunes no solo por el caso que involucra presuntamente a su esposa, sino también por otros procesos que han venido afectando a su gobierno como el ‘Caso Koldo’, que señala a un exasesor del político José Luis Ábalos de intentar lucrarse de los contratos de compra de tapabocas o mascarillas durante la pandemia.
Rojas, no obstante, enfatiza en que una dimisión al cargo representaría una derrota enorme para el líder del Partido Socialista Obrero Español (Psoe), pues una renuncia de este tipo no se presenta desde 1981 cuando Adolfo Suárez dio un paso al costado y abandonó el cargo de presidente del Gobierno.
«Por primera vez en su inédita carrera política, llena de caídas y remontadas, Pedro Sánchez ha mostrado que su resistencia tiene un límite», aseguró por ejemplo Carlos Cué, periodista político del diario español El País.
Ricard González, periodista de La Nación, cree no obstante que «es imposible saber si Sánchez se plantea realmente dimitir, o si el anuncio es un golpe de efecto que busca generar una reacción de simpatía popular».
¿Qué pasará a partir del lunes si Sánchez decide renunciar?
Así, el artículo 101 de la Constitución Española contempla que un gobierno cesará en caso de una dimisión, por el fallecimiento del jefe del Ejecutivo o por la pérdida de confianza parlamentaria, es decir, si el Ejecutivo termina perdiendo una moción de confianza.
García asegura que si Sánchez opta finalmente por dejar el liderazgo del Ejecutivo tendrá que presentar su dimisión formal ante el rey Felipe VI, el jefe de Estado en España. «Aunque la renuncia se presenta, es el Rey quien formalmente debe aceptarla, si bien esto es mayormente una formalidad», explica.
En ese caso, todo el gabinete continuaría en funciones hasta que se nombre un nuevo presidente del Gobierno. Ello significa que el Ejecutivo estaría limitado en sus atribuciones, sin capacidad para legislar, y sería responsabilidad del Congreso elegir a un nuevo presidente en un procedimiento idéntico al de las investiduras que se celebran tras unas elecciones generales.
¿Cómo funciona el proceso para elegir un nuevo presidente?
Medios españoles aseguran que María Jesús Montero, vicepresidente primera del gobierno y ministra de Hacienda, podría ser la sustituta de Sánchez y la designada para intentar formar gobierno si el actual líder socialista abandona el poder.
En ese caso, el candidato designado por el rey para suceder a Pedro Sánchez tendría que someterse a un debate de investidura y posterior votación en el Parlamento. Para obtener la confianza del Congreso y ser elegido presidente, el candidato debe recibir el apoyo de la mayoría absoluta de la Cámara en una primera votación. Si no lo logra, puede someterse a un segundo voto en donde el requisito es obtener más síes que noes.
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Feijóo no alcanzó los votos necesarios para convertirse en presidente del Ejecutivo y el rey optó por postular nuevamente a Sánchez, en el poder desde 2018. El ascenso del socialista, no obstante, quedó en manos de partidos independentistas que le otorgaron su voto a cambio de concesiones que aún le pesan. El presidente, por ejemplo, acordó apoyar una ley de amnistía para los líderes catalanes que participaron en el intento secesionista de 2017, una alianza por el que ha recibido cientos de críticas.
En ese panorama, no es seguro que el Psoe pueda lograr los votos para investir a un nuevo candidato, como tampoco los lograría un candidato del opositor Partido Popular.
«El Psoe no es un proyecto de equipo, sino de un solista. No cuenta con delfín claro, ni tampoco algún político o ministro independiente del gobierno con un tirón popular significativo, algo imprescindible para sobrevivir a la crispación ambiental», señala al respecto el periodista González.
Si pasados dos meses ningún candidato designado por el rey logra la confianza de la cámara baja, el Parlamento (Congreso y Senado) se disuelve de forma automática y se convocan nuevas elecciones generales.
¿Y qué opciones le quedan a Sánchez si decide no dejar el cargo?
Pero lo cierto es que Sánchez no podría convocar elecciones generales el lunes próximo sino que debería esperar al menos hasta el próximo 31 de mayo para convocar otros comicios generales.
Esto debido a que la ley impide que el presidente disuelva el Parlamento antes de que pase un año de la anterior disolución. Como se recuerda, Sánchez disolvió el Parlamento el 29 de mayo de 2023 luego de que su partido obtuvo un mal resultado en los comicios locales que se celebraron ese fin de semana en España.
Para Rojas, si bien la opción de convocar los comicios sería una salida más digna para Sánchez si se compara con la dimisión, la convocatoria sería una alternativa desgastante para la ciudadanía y, ante la imagen deteriorada de Sánchez, su partido correría el riesgo de perder integrantes en el Parlamento. «Quizás eso es lo que está analizando antes de pronunciarse el lunes», asegura el experto.
En ese sentido, Federico Santi, analista de Eurasia Group, le dijo a Bloomberg que efectivamente Sánchez podría estar aprovechando la oportunidad para desencadenar una moción que refuerce su mandato en el Parlamento.
¿Qué es la cuestión de confianza y cómo funcionaría?
La moción de confianza se dará por aprobada si el líder del Ejecutivo obtiene una mayoría simple en la Cámara de Diputados, es decir, más votos afirmativos que negativos. Si por el contrario Sánchez pierde la votación (no logra más síes que noes), el país debe arrancar el proceso para escoger un nuevo presidente del Gobierno, que incluye la postulación del rey y la posterior votación del Parlamento.
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¿Cómo quedan Sánchez y su esposa después de la acusación?
«El gobierno de Sánchez ya era inestable y con estos acontecimientos sólo empeorará. Su gobierno en minoría cuenta con el apoyo de los separatistas catalanes, pero ese apoyo no ha sido muy fuerte desde el principio (…) Independientemente de que el presidente del Gobierno dimita el lunes o no, esto parece ser el comienzo de una crisis política en España», afirma.
Para el analista Cristian Rojas, por su parte, si bien Sánchez apeló a su familia y al amor por su esposa para responder a las críticas este miércoles, será muy difícil que la opinión pública pueda darle su voto de confianza al líder socialista si el proceso judicial contra su pareja progresa ante la justicia, lo que lo dejaría debilitado.
»La pregunta es si los hechos son falsos o son ciertos. Él apela a la victimización y a mostrar que se trata de una estrategia política más que de una verdad judicial. Pero va a ser muy difícil que los españoles compren esa idea si las investigaciones avanzan y hay indicios serios. Para apoyarlo, el público esperaría que la justicia dé por cerrado el caso y que lo considere tan falso como él dice que es», señala.
Él apela a la victimización y a mostrar que se trata de una estrategia política más que de una verdad judicial
»La Constitución prevé mecanismos robustos para la transición de poder y ha manejado situaciones políticas complejas en el pasado por lo que no necesariamente habría inestabilidad. Sin embargo, la fuerte crispación que se vive en la opinión pública podría influir temporalmente en la estabilidad política hasta que se resuelva la situación y evidentemente afectará a unas hipotéticas elecciones», concluye.
En el caso de Begoña Gómez, la esposa del presidente, el mandatario ya comentó que presentaron acciones legales contra los medios que publicaron las acusaciones y que la mujer «defenderá su honorabilidad y colaborará con la justicia para esclarecer los hechos».
Al contrario, de ser declarada culpable, el diario La Razón asegura que Gómez se podría enfrentar a penas de entre seis meses y dos años, multas y hasta inhabilitaciones por el delito de tráfico de influencias. Por el delito de corrupción en negocios, las penas aumentan hasta los cuatro años de prisión e incluyen también multas e inhabilidades para actividades empresariales o profesionales.
El futuro de Sánchez y su esposa, en todo caso, está por verse.
ANGIE NATALY RUIZ HURTADO – REDACCIÓN INTERNACIONAL – EL TIEMPO