Tensión empaña el desfile del 14 de julio en París
Enfrentamientos entre policías y manifestantes en los parisinos Campos Elíseos empañaron este domingo la fiesta del 14 de julio en Francia, luego de que el presidente francés, Emmanuel Macron, encabezó un desfile bajo el signo de la cooperación militar europea.
Tras el desfile, decenas de manifestantes que decían ser integrantes del movimiento de los ‘chalecos amarillos’ pero no llevaban su habitual chaquetilla fosforescente levantaron obstáculos y quemaron basura sobre la turística avenida parisina.
Los agentes antimotines trataron de dispersar con gases lacrimógenos a los manifestantes, algunos de quienes llevaban los rostros cubiertos con pañuelos, máscaras o capuchas.
Un total de 180 personas fueron detenidas al margen del desfile militar, antes de estos incidentes, dijo la policía.
Es la primera vez que los ‘chalecos amarillos’ se manifiestan en los Campos Elíseos desde el 16 de marzo, cuando se registró un nuevo auge de violencia de este movimiento social de protesta iniciado en noviembre por un proyecto para aumentar el precio de los combustibles.
En la apertura del desfile, al bajar los Campos Elíseos a bordo de un vehículo militar abierto junto a su jefe de Estado Mayor, Macron, que encabezó por tercer año la fiesta nacional desde su elección en mayo de 2017, recibió silbidos de los ‘chalecos amarillos’ mezclados en la multitud, mientas que otros espectadores aplaudían.
“Aquellos que han querido impedir este desfile deberían tener un poco de vergüenza”, declaró, antes de los incidentes, el ministro del Interior, Christophe Castaner.
Macron y sus invitados europeos presenciaron el desfile desde una tribuna en la plaza de la Concordia, en uno de los extremos de los Campos Elíseos.
“Nunca, desde el final de la Segunda Guerra Mundial, Europa había sido tan necesaria. La construcción de una Europa de la defensa, vinculada con la Alianza Atlántica, de la que celebramos los 70 años, es para Francia una prioridad” y “constituye el hito de este desfile”, explicó el presidente francés.
Frente al brexit y a unas relaciones transatlánticas un tanto debilitadas durante la era Donald Trump, Macron ha hecho de la Europa de la defensa uno de sus temas predilectos, al considerar que para el Viejo Continente es crucial incrementar su autonomía estratégica, complementaria a la Otán.
Nunca, desde el final de la Segunda Guerra Mundial, Europa había sido tan necesaria. La construcción de una Europa de la defensa, vinculada con la Alianza Atlántica.
Además de la canciller alemana, Angela Merkel, asistieron el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, y el secretario general de la Otán, Jens Stoltenberg.
La primera ministra británica, Theresa May, a quien le quedan unos diez días en el cargo tras presentar su dimisión, estuvo representada por el vice primer ministro, David Lidington. Otros nueve países estuvieron representados a nivel de jefes de Estado, de Gobierno o ministro de Defensa.