¿Qué le espera al Reino Unido con su nuevo primer ministro?
Desde este martes los británicos tienen un nuevo primer ministro: el excanciller Boris Johnson, cuyo gobierno de derecha, antiinmigrante y promotor de un ‘brexit duro’ (salida de la Unión Europea sin acuerdos) podría cambiar la dinámica de política mundial, siguiendo el mismo tono de su colega estadounidense, Donald Trump.
El polémico, pero carismático político se alzó con el liderazgo del partido Conservador, que gobierna el Reino Unido desde el 2010, con una minoría que le da poco margen de control.
Johnson ganó holgadamente con 92.153 votos contra 46.556 de su competidor, Jeremy Hunt, el multimillonario secretario de Relaciones Exteriores.
Su éxito o fracaso, como él mismo reconoce, está atado a que logre cumplir con el mandato de sacar a su país de la Unión Europea ‘con o sin acuerdo’, intento que ya le costó el cargo a su predecesora, Theresa May, y que ha puesto a su país al borde la peor crisis desde la Segunda Guerra Mundial.
El exalcalde de Londres Boris Johnson y el ministro de Exteriores, Jeremy Hunt.
El exalcalde de Londres y exsecretario de Relaciones Exteriores de May recibirá este miércoles el mandato oficial de manos de la propia Reina Isabel II quien, de acuerdo al protocolo oficial, lo invitará a tomar el té en el palacio de Buckingham, residencia oficial de la monarca de 93 años.
Luego, dará cuentas a la Cámara de los Comunes, en el Palacio de Westminster, donde sesiona el Parlamento de 650 miembros.
En su discurso de aceptación de su triunfo, Johnson repitió su consigna de campaña: “culminar el brexit, unir al país y derrotar a Jeremy Corbyn, (el opositor del partido Laborista). Eso es lo que vamos a hacer”.
Ante una sala llena de ‘tories’, como se llaman a los conservadores, arengó a sus seguidores con un “vamos a culminar el brexit para el 31 de octubre y vamos a beneficiarnos de todas las oportunidades que traerá un nuevo espíritu de podemos hacerlo…”.
Uno de los primeros en celebrar el resultado fue el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, con un tuit: “¡Será genial!”, escribió.
Culminar el brexit, unir al país y derrotar a Jeremy Corbyn, (el opositor del partido Laborista). Eso es lo que vamos a hacer.
Ni fácil ni rápido
Ese triunfalismo de quienes muchos ven como el ‘Trump británico’ por sus formas poco convencionales de hacer política, choca contra quienes advierten que sus planes ‘brexitarios’ no serán tan rápido ni fáciles como hace ver Johnson.
El gobernante tendrá solo cien días para tratar de cumplir su mentada promesa de “do or die” (hacer o morir), y sacar el brexit antes del 31 de octubre próximo.
Johnson dijo que los británicos votaron por la «liberación» y descartó que la salida de la UE suponga una desventaja para el Reino Unido.
Facundo Arrizabalaga / EFE
“Tendrá que nombrar su gabinete ministerial para negociar un nuevo acuerdo con Bruselas, sede del bloque europeo, mientras en casa deberá enfrentarse a un Parlamento hostil, que ya le juró la guerra antes de tomar el poder y que la semana pasada sacó una ley que impide una salida de la UE sin acuerdo”, dijo a EL TIEMPO el economista y analista político, Ulysses Maldonado.
En política exterior, “deberá ponerle la cara a la crisis con Irán”, agregó el analista, al comentar que podría desencadenarse en una potencial confrontación armada en las aguas del Golfo Pérsico, donde un buque británico está retenido por fuerzas iraníes.
Otros expertos consultados por EL TIEMPO creen que hay que ponerle un ojo al estilo de gobierno de Johnson.
Tendrá que nombrar su gabinete ministerial para negociar un nuevo acuerdo con Bruselas, sede del bloque europeo, mientras en casa deberá enfrentarse a un Parlamento hostil.
“El gran desafío que se le avecina es que tiene que ser primer ministro no solo para una facción de su partido, sino de todos los conservadores y toda la sociedad británica”, dijo el profesor universitario Stephen Bellas, para quien Johnson “tiene que intentar logar un acuerdo con la UE para impedir el derrumbe de la economía y provocar una crisis en las dos Irlandas”.
Tiene que intentar logar un acuerdo con la UE para impedir el derrumbe de la economía y provocar una crisis en las dos Irlandas
El hasta ahora el secretario del Tesoro británicas, Philip Hammonds, alerta que el país podría caer en una profunda crisis económica si no se maneja bien el tema del brexit, por la promesa de bajar los impuestos a los empresarios, (similar a la política de Trump en EE.UU.) y el cierre del mercado europeo para las exportaciones de las islas británicas.
Por su parte, el analista y profesor del London School of Economics, Isaac Bigio, advierte que una política hostil y centralista de Johnson podría en juego al propio Reino Unido, cuyos países Escocia, País de Gales e Irlanda del Norte estarían considerando pedir la secesión del territorio británico.
María Victoria Cristancho
Para EL TIEMPO
- @mavicristancho