Uruguay: mantiene un gobierno de izquierda o gira a la derecha
El Frente Amplio, partido del actual presidente Tabaré Vásquez y de Pepe Mujica, aspira mañana domingo a ganar, por cuarta vez consecutiva, las elecciones presidenciales en Uruguay, pero en esta ocasión el triunfo no se ve tan claro.
Cerca de 2,7 millones de uruguayos acudirán obligatoriamente a las urnas para decidir si mantienen el apoyo de los últimos 15 años a una izquierda que ha mostrado avances sociales importantes pero que ya sufre el desgaste propio de 3 lustros de gobierno; o si, por el contrario, sigue la tendencia de buena parte de América Latina y vota por una derecha que apela al descontento producido por el estancamiento de la economía, el aumento de la inseguridad y casos puntales de corrupción.
Los últimos sondeos revelados horas antes de que comenzara la veda electoral, mostraron un leve repunte del candidato del Frente Amplio, Daniel Martínez, un ingeniero de 62 años, quien renunció en abril a su cargo como intendente de Montevideo para sumarse a la campaña por la Presidencia de la República Oriental del Uruguay.
Daniel Martínez, candidato presidencial de Uruguay del oficialista partido Frente Amplio.
Reuters
Los resultados no son suficientes para convertirse en el primer mandatario de los uruguayos ya que se requiere de una mayoría absoluta del 50% más un voto. Lo que indica que habrá balotaje el 24 de noviembre con el segundo en las encuestas, el senador de derecha, Luis Lacalle Pou, del Partido Nacional, hijo del expresidente Luis Alberto Lacalle a quien muchos achacan casos de corrupción de los que el propio candidato trató de desmarcarse durante la campaña.
Los otros dos candidatos a tener en cuentas son, Luis Talvi, del Partido Colorado, quien obtendría el 13% y el exmilitar, Guido Manini Rios del partido Cabildo Abierto con 11% de los votos. Aunque no van a llegar al balotaje, pueden resultar determinantes en las alianzas que se comiencen a tejer a partir del lunes con miras a noviembre.
Francisco Faig, politólogo del Instituto de Estudios Políticos de París y catedrático en Uruguay, dijo en entrevista con EL TIEMPO en Montevideo, que en principio los votos del exmilitar Manini Ríos se irían hacía “los blancos” del Partido Nacional.
“Los votos del Partido Colorado van a estar más divididos para el balotaje. Dependiendo de la cantidad de votos que consiga, uno podría pensar que un 5% se irían a Daniel Martínez del Frente Amplio y la base del Partido Colorado, que es como un 10% puede irse hacía Luis Lacalle Pou”, aseguró el politólogo a El Tiempo.
Agregó que, los uruguayos están siendo críticos con la situación que viven, lo cual no quiere decir que vayan necesariamente a votar por una alternancia.
“Lo que es claro es que en cualquier proceso de mejoras de niveles de ingresos, las exigencias se hacen mayores y van cambiando los objetivos. Eso es lo que vive el país luego de 16 años de crecimiento económico. Ahora las demandas son otras, distintas a las de 2004. Y el Frente Amplio no necesariamente está logrando satisfacerlas como sí logró hacerlo en campañas y elecciones pasadas”, aseguró el analista.
Luis de Lacalle, candidato presidencial uruguayo del Partido Nacional, de derecha.
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Además del presidente y vicepresidente, los uruguayos elegirán también la Asamblea General, 30 senadores y 99 diputados que conforman las dos cámaras de su poder legislativo.
De manera simultánea, votarán el plebiscito constitucional sobre la seguridad impulsado por el senador del Partido Nacional, Jorge Larrañaga. La iniciativa “Vivir Sin Miedo” propone la creación de una Guardia Nacional con 2.000 militares que cumplirían funciones de policía en materia de seguridad ciudadana. También propone hacer allanamientos nocturnos, previa autorización de un juez y cadena perpetua revisable para delitos como violación o abuso sexual y homicidio a menores.
Claudia Gaona
Para EL TIEMPO
Montevideo