Se subestimó la capacidad de Maduro en Venezuela: embajador Santos
Si bien tanto Estados Unidos como Colombia siguen muy comprometidos con la lucha por el regreso de la democracia en Venezuela, el embajador ante la Casa Blanca, Francisco Santos, reconoció este lunes que se subestimó la capacidad del presidente Nicolás Maduro para aferrarse al poder.
«Todos hicimos un cálculo equivocado de que esto se resolvía más rápidamente de lo que pensábamos… Se subestimó la capacidad de Maduro de quedarse, la capacidad de proteger su entorno, que es Caracas; se ha subestimado la capacidad de reacción de la economía venezolana, que está dolarizada», dijo Santos durante un desayuno con periodistas en la capital de EE. UU, que convocó para hacer un balance del año y de su gestión.
(Le puede interesar: EE. UU. aceptaría transición en Venezuela que incluya a chavistas)
Además, de acuerdo con el embajador, si bien las sanciones que ha impuesto EE. UU. están funcionando, estas todavía no han logrado llevar al régimen a su «punto de quiebre».
Santos, no obstante, se mostró «cautelosamente optimista» de que la estrategia contra Maduro tarde o temprano dará resultados. Habló, a su vez, de una reciente reunión con autoridades de EE. UU. para mirar «nuevos pasos» que se darían en el futuro próximo para afinar ese objetivo.
El diplomático, de paso, defendió a Juan Guaidó como líder de la oposición y presidente encargado por la Asamblea Nacional, y expresó confianza en que este será reelecto en enero próximo.
El embajador hizo énfasis, también, en lo mucho que se ha logrado en el año que ha pasado desde que la Asamblea proclamó a Guaidó como presidente.
Entre ello, que 60 países lo reconozcan como presidente, que se considere a la Asamblea como el único órgano de poder legítimo y el aislamiento internacional al que se tiene sometido a Maduro.
Todos hicimos un cálculo equivocado de que esto se resolvía más rápidamente de lo que pensábamos… Se subestimó la capacidad de Maduro de quedarse, la capacidad de proteger su
entorno
«Mi papel como embajador es que no se agote el interés que existe en EE. UU. para resolver el problema de Venezuela y frente a la crisis de los migrantes en Colombia. En el Congreso, por ejemplo, sigue existiendo apoyo bipartidista y no se ha perdido el sentido de urgencia», afirmó el funcionario no sin antes admitir que las elecciones en EE. UU. del año 2020, y las distracciones que eso traerá, harán más difícil la tarea.
Santos se refirió a su vez al tema de la disputa con la empresa estadounidense Wal-mart luego de que el portal en Canadá de la firma promocionó la venta de un suéter navideño en el que se mencionaban las bondades de la cocaína colombiana.
El embajador confirmó la cancelación de una cita prevista con directivos de la empresa, pero hizo hincapié en que su trabajo era servir de puente para que se pueda subsanar el impase que se ha presentado luego de que el Gobierno anunció que demandaría a la empresa.
En su resumen, Santos destacó la ayuda entregada por EE. UU. a Colombia, que en el 2019 habría llegado a una cifra récord.
Sumadas, la asistencia al país de este año en curso habrá superado los 700 millones de dólares. Unos 418 millones de dólares de ellos para los programas de lucha contra el narcotráfico y respaldo a los acuerdos de paz, más de 160 millones de dólares para atender la crisis de los migrantes y refugiados en Colombia, y otra partida de 123 millones de dólares en ayuda contra el narcotráfico y control territorial que se redirigió de fondos antes previstos para Centroamérica.
Hasta ahora, el máximo de recursos que EE. UU. había entregado a Colombia durante un mismo año fue de unos 650 millones de dólares en el año 2000, cuando se aprobó por primera vez el Plan Colombia.
Así mismo, Santos destacó la decisión de la administración de Donald Trump de certificar el compromiso del presidente Iván Duque en la lucha contra el tráfico de drogas a pesar de la expansión de los cultivos ilícitos que se registró durante el gobierno anterior.
También, la creación de un grupo de trabajo para coordinar con EE. UU. la estrategia antinarcóticos y decenas de visitas al Congreso para elevar el perfil de la crisis migratoria que golpea al país.
En lo comercial, el embajador mencionó múltiples visitas a estados de EE. UU. para promover la inversión en el país y aprovechar la enorme oportunidad que está creando la disputa comercial entre EE. UU. y China.
Según Santos, la idea es competir con Vietnam y volver a Colombia una alternativa viable para empresas que antes dependían del gigante asiático para abastecer sus líneas de producción.
Resaltó, en este mismo frente, la expansión del acceso al mercado de EE. UU. de productos agrícolas y la preparación del terreno para facilitar la exportación de pimentones en fresco, pitaya y mango, que se encuentra en su último tramo.
Además de promover a Colombia como un hub para otros productos de alta tecnología y en la industria del cine y la televisión, Santos también habló de empujar otro sector agrícola que, según dice, puede transformar al país.
«Mi apuesta es el arándano y el aguacate Hass. Estos pueden transformar la agricultura en el país. Ambos productos tienen el potencial hasta de superar (las exportaciones) de café y flores. Y para lograrlo debemos ser muy agresivos en materia comercial», dijo el embajador en alusión al enorme mercado que existe para estos dos productos en EE. UU.
Sergio Gómez Maseri
Corresponsal de EL TIEMPO
Washington