Partido de López Obrador, en camino a controlar bastión opositor en elección estatal clave de México

México celebra el domingo unas votaciones que lucen encaminadas a reforzar al presidente Andrés Manuel López Obrador antes de la elección de su sucesor el próximo año dado que se prevé que su partido capture el último bastión importante de los antiguos gobernantes del país.

Se espera que el izquierdista Movimiento Regeneración Nacional (Morena) del mandatario sume el liderazgo en el Estado de México a los 21 gobiernos regionales que ya controla, dos tercios del total.

El Estado de México, que rodea a la capital del país y es la entidad más poblada, ha sido un importante baluarte económico y electoral del centrista Partido Revolucionario Institucional (PRI), que gobierna allí desde 1929.

López Obrador derrotó al PRI para ganar la presidencia en 2018 y desde entonces Morena ha absorbido la mayoría de los bastiones del otrora dominante partido, así como a muchos de sus políticos.

Décadas de gobierno de un solo partido hicieron del PRI un sinónimo de corrupción para muchos mexicanos, y ha tenido problemas para competir con el mensaje de Morena de que representa un voto por el cambio.

Una encuesta publicada esta semana por el diario Reforma mostró que la carrera por la gobernatura se ha reducido, pero aun así le da a la candidata de Morena, Delfina Gómez, una ventaja de 10 puntos sobre Alejandra del Moral, una política del PRI que lidera una alianza opositora.

«La gente se está inclinado por Delfina porque parece como un cambio nuevo, como el de López Obrador», dijo José Hernández, un comerciante de 64 años en Los Reyes Acaquilpan, una ciudad en el oriente del estado, de 17 millones de habitantes. «Porque en pocas palabras, todo ese partido (PRI) ha sido corrupto».

Gómez promete dar un nuevo comienzo al estado y mejorar la seguridad, teniendo en cuenta la preocupación generalizada por la violencia. Del Moral dice que el PRI ha aprendido de sus errores y que su coalición será una alternativa más amplia con respecto a Morena.

La votación se produce un año antes de los próximos comicios presidenciales, y las encuestas indican que Morena también será entonces muy difícil de vencer.

En una elección separada el domingo, se pronostica que el PRI mantendrá el estado fronterizo norteño Coahuila, donde las divisiones dentro de Morena produjeron candidatos rivales de izquierda.

El partido del presidente López Obrador buscó esta semana consolidar el apoyo en Coahuila presionando a uno de sus partidos aliados para que declinara la candidatura de su propio abanderado para favorecer al morenista.

Carrera por la Presidencia

López Obrador ha dominado la vida política desde que asumió el cargo en diciembre de 2018, y su popularidad, que se mantiene firme en torno al 60%, ha ayudado a hacer de Morena una máquina electoral aceitada. De acuerdo con la ley mexicana, los presidentes solo pueden cumplir un mandato de seis años.

Sin embargo, su estilo combativo, que ha enfrentado al Estado contra la empresa privada y ha alimentado el conflicto con otros poderes, como el Judicial, también ha polarizado a los votantes.

López Obrador ha criticado con frecuencia a algunos sectores de votantes de clase media, y Ciudad de México y el Estado de México en 2021 le dieron a Morena inesperados reveces en las elecciones locales.

La alcaldesa de Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, ha tenido una ligera ventaja en la mayoría de las encuestas para la carrera en busca de ser la candidata presidencial de Morena, seguida de cerca por el canciller, Marcelo Ebrard.

Sheinbaum, al igual que Gómez, la abanderada del Estado de México de Morena, está estrechamente identificada con López Obrador y su agenda.

Algunos analistas argumentan que si Morena no captura el Estado de México ello podría derivar en que el oficialismo presente un contrincante visto más moderado, como Ebrard.

Debido a que durante meses se ha dado por sentada una victoria de Morena, una sorpresa daría un poderoso impulso a la oposición, dijo Roy Campos, jefe de la encuestadora Consulta Mitofsky. «Para Morena el perder ese estado significaría prácticamente iniciar muy mal la contienda hacia el 2024».

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