Familia de colombiano que murió en centro de detención en Londres denuncia negligencia

El pasado 26 de marzo se conoció de la muerte del colombiano Frank Ospina, un hombre de 39 años que estaba recluido en un centro de detención de migrantes en el Reino Unido. Estaba a la espera de ser liberado para reencontrarse con su madre. Sin embargo se quitó la vida en su celda, según informaron las autoridades.

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La salud de los migrantes es un tema pendiente de los Estados. El estrés y la depresión suelen aparecer en estos ciudadanos que solo ansían salir de las prisiones preventivas. En el caso de Ospina, estos factores pudieron influir según relataron sus familiares a EL TIEMPO.

El colombiano –según relato de un allegado- había obtenido el ingreso en la Universidad de Cadiz, en España, para realizar una maestría y completar sus estudios. Era ingeniero egresado de la Universidad del Valle en Cali.

Su madre vivía desde hacía más de 15 años en Europa y actualmente ofrece sus servicios de limpieza en Londres, por lo que era una oportunidad para reencontrarse con su hijo, quien pagó la matrícula y viajó a visitarla. Consiguió un empleo en un restaurante pero un día fue detenido en el local por la policía. Su situación de migrante irregular fue el motivo.

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“Tuvo dos intentos de quitarse la vida», narra a este diario un familiar que prefirió mantener su anonimato. Luego, se quitó la vida en prisión, aunque sus familiares se preguntan cómo pudo hacerlo si estaba bajo custodia.

Lo enterramos pero no lo pudimos ver. Ya no podía dormir del estrés pedí que lo ayudarán psiquiátricamente pero no atendieron mi correo

Ospina llegó en diciembre de 2022 a España, luego viajó a Londres y consiguió trabajo hasta que fue detenido. “Salió a recoger unos platos y lo detuvieron. Ni a mi mamá ni a mi nos han querido dar el dinero por los días que trabajó”, comentó el familiar.

Al parecer el hombre sintió frustración al ver que otros de sus compañeros de celda quedaban libres. Incluso ayudaba a algunos a comunicarse, pues hablaba algo de mandarín y alemán.

El gobierno de ese país repatrió el cuerpo a Colombia, donde fue enterrado por sus familiares, quienes no tuvieron mayor explicación del suicidio, e insisten en que hubo negligencia pues constantemente pedía liberación para no perder sus estudios en España.

Ospina fue repatriado a Colombia

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“Lo enterramos pero no lo pudimos ver. Ya no podía dormir del estrés pedí que lo ayudarán psiquiátricamente pero no atendieron mi correo”, dice el familiar.

“Él amaba hacer ejercicio, la vida, leer. Su sueño era terminar sus estudios, trabajar y estar al lado de mi mamá ayudándola para que ya no limpiara. Queremos que quede un precedente para que a nadie más viva lo mismo. Cuando haya un solo indicio de estado mental mal, se actúe”, dijo uno de sus hermanos.

Según la Organización Panamericana de la Salud (OPS), un estudio reportó la presencia de síntomas depresivos leves a moderados en los inmigrantes latinos. “ Según un estudio, la soledad y el aislamiento podrían estar exacerbados en migrantes con más edad debido a las barreras que enfrentan para la participación social, tales como una falta de dominio del idioma y un trato injusto por parte del país anfitrión” dice una de las publicaciones.

Las autoridades

Sobre la muerte de Ospina, The Guardian publicó que el colombiano estaba recluido en el centro de expulsión de inmigrantes de Colnbrook, cerca de Heathrow. Un aviso a los detenidos del gerente del centro Paul Rennie fechado el día en que el hombre murió afirma: «Es con respecto a que tengo que anunciar que el residente Frank Ospina tristemente falleció hoy.»

Rennie añadió: «por favor, tenga la seguridad de que estamos haciendo todo lo posible para reducir los riesgos de que tales incidentes vuelvan a ocurrir en el futuro.»

El cuerpo de Ospina fue repatriado

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The Guardian informó que además de los informes recibidos sobre las intenciones de suicidio de otros migrantes, se supo que algunos organizaron protestas en el centro.

El periódico detalla que las organizaciones de beneficencia cuestionan los retrasos en los informes de la conocida regla 35, la cual evalúa la vulnerabilidad de los detenidos entre ellas si existe riesgo o no de suicidio.

Un detenido en Harmondsworth dijo a The Guardian: «Todos nos sentimos muy frustrados después de la muerte el domingo. Lo conocí cuando estaba en el ala de inducción y me sorprendió cuando oí que había muerto. Hay muchas tensiones aquí porque más detenidos intentaron suicidarse después de que circulara la noticia de la muerte del señor Ospina. El centro está a plena capacidad en este momento.»

Pierre Makhlouf, director legal de Bail For Immigration Detainees, dijo: «Estamos angustiados al recibir noticias de que un hombre ha muerto y otros han intentado suicidarse en el IRC de Heathrow. Nos preocupa seriamente que la situación se esté deteriorando en el centro. Hemos recibido informes de autolesiones y un empeoramiento de las condiciones generales. La atmósfera en el IRC de Heathrow se describe como tensa», escribe The Guardian.

ANA MARÍA RODRÍGUEZ BRAZÓN
REDACCIÓN INTERNACIONAL 

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