Corte británica pone a Boris Johnson contra las cuerdas
La justicia británica asestó este martes un golpe implacable al primer ministro
Boris Johnson al considerar «ilegal y sin efecto» su decisión de suspender el parlamento hasta los días previos al brexit, tras lo cual se multiplicaron los llamados a su dimisión.
Johnson, que se encontraba en Nueva York para la Asamblea General de la ONU, afirmó estar «profundamente en desacuerdo con lo que los jueces dictaron».
Se impuso la soberanía parlamentaria en el Reino Unido, donde nadie ni siquiera la Corona ni el Primer Ministro puede estar por encima de la ley.
Ese fue la contundente decisión de la Corte Suprema de Justicia británica al poner contra las cuerdas al primer ministro, Boris Johnson, con su veredicto de que declara que actuó ilegalmente al recomendar a la Reina Isabel II cerrar el Parlamento por seis semanas para impedir el debate sobre la salida del país de la Unión Europea, o brexit, prevista para el 31 de octubre próximo.
En la peor crisis constitucional de la historia británica, el tribunal supremo zanjó la polémica que puso a prueba el sistema democrático británico, con un tajante veredicto de sus once magistrados, con socavó aún más el ya frágil poder de Johnson, y da a los legisladores un margen para tratar de evitar que saque a Gran Bretaña del bloque el próximo mes, con o sin un acuerdo de divorcio.
Johnson, quien asumió el poder hace menos de tres meses en reemplazo de Theresa May, había pedido el cierre parlamentario, para evitar cualquier obstáculo a su plan de brexit con o sin acuerdo y evitarse más confrontaciones en el Parlamento, que ya le había asestado seis derrotas en menos de dos semanas y le había quitado el control de la agenda legislativa.
Actuó ilegalmente
El cierre parlamentario provocó un sinfín de protestas y cuatro demandas judiciales que desembocaron en recursos ante la Corte Suprema, luego de que un tribunal de Edimburgo y otro de Londres dictasen sentencias contradictorias.
Al máximo tribunal le tomó apenas unas horas llegar a una decisión, luego de escuchar en audiencia de emergencia de tres días la semana pasada, que expuso diferencias legales fundamentales sobre la interpretación de la constitución no escrita del país.
Varias personas protestan contra el primer ministro británico Boris Johnson y celebran la decisión del Supremo que declaró ilegal el cierre del parlamento.
“Este tribunal … concluyó que el consejo del Primer Ministro a Su Majestad (la Reina Isabel II de suspender el parlamento] era ilegal, nulo y sin efecto. Esto significa que la orden en el consejo a la que condujo también era ilegal, nula y sin efecto, debería ser anulada”, leyó Brenda Hale, presidenta de la Corte Suprema.
Según la magistrada, «esta no fue una prórroga normal en el período previo al discurso de la Reina. Impidió que el Parlamento desempeñara su papel constitucional durante cinco de las ocho semanas posibles entre el final del receso de verano y el día de salida el 31 de octubre”.
«No cabe duda de que hay mucha gente que quiere frustrar el brexit«, denunció el primer ministro desde Nueva York, antes de tomar un vuelo de emergencia de vuelta a Londres para atender la crisis. “Este es obviamente un veredicto que respetaremos«, aseguró, pero no dio muchas luces de cuál será su próxima movida.
No cabe duda de que hay mucha gente que quiere frustrar el Brexit
Nada claro
Según algunos analistas, lo que viene en el escenario político es la reapertura parlamentaria, una casi segura renuncia de Johnson y la posibilidad de que se posponga una vez más el brexit.
De hecho, el presidente del Parlamento, John Bercow, llamó inmediatamente el Parlamento para este miércoles a las 11 de la mañana. Mientras, en el Congreso anual del Partido Laborista ,en la balnearia ciudad de Brighton, un triunfante jefe de la oposición, el Jeremy Corbyn, pidió la renuncia de Johnson y que se convoque a elecciones generales en seis meses.
Una de las incógnitas que genera la crisis es quién podría reemplazar a Johnson ante una eventual y cada vez más probable renuncia.
Reuters
“Todavía estoy en shock con la decisión, por que fue por unanimidad y por lo contundente y poderoso del veredicto”, aseguró a El TIEMPO, Joelle Grogan, profesora de leyes de la londinense Universidad de Middlesex, la decisión de la Corte “hace que vuelva a imperar la ley y no el capricho de un gobernante, con lo que se ratifica la constitución y es algo que será parte de los estudiosos constitucionales en el futuro.”
Una de las incógnitas que genera la crisis es quién podría reemplazar a Johnson ante una eventual y cada vez más probable renuncia. El problema, según los observadores, es que el laborista Jeremy Corby, quien puja por el cargo, genera tantas animadversiones como el propio Boris Johnson.
Nadie sabe qué puede pasar, pero lo que sí es seguro es que Johnson no saldrá bien parado
Para el analista y profesor universitario, Isaac Biggo, “veremos una disputa parlamentaria para lograr que se postergue el brexit hasta finales enero del 2020. Es posible que se llame a un gobierno provisional, como propone el partido Liberal Demócrata, dirigido por el padre de la Cámara de los Comunes, que son los parlamentarios más antiguos como Kenneth Clark, que lleva casi medio siglo en el Parlamento, o la laborista Harriet Harman.
Por su parte la periodista y analista Laura Kuenssberg, comentó a El TIEMPO que “nadie sabe qué puede pasar, pero lo que sí es seguro es que Johnson no saldrá bien parado. En el corto periodo, el primer ministro logró lo que ninguno de sus predecesores en la historia de la política británica, perdió la mayoría mínima para gobernar con menos de 300 diputados sobre los 650 que hay en el Parlamento. Y así no se puede gobernar”.
María Victoria Cristancho
Para EL TIEMPO
Londres
En Twitter: @mavicristancho